Hoy es un día especial para Jamie, no porque sea su cumpleaños, que también, sino porque es el primero que falta alguien tan especial para él. Y a mi memoria llega una anécdota contada por el querido profesor de cuando Jamie, llamó a la puerta de este mundo.
Y contaba así, más o menos:
Mi esposa estaba fuera de cuentas, y decidimos, para que estuviera tranquila, que me llevara a las niñas a recorrer un castillo. Yo acepté intranquilo, puesto que sabía que el nacimiento de mi tercer hijo sería inminente.
Las niñas disfrutaron mucho con la idea. No tanto yo. Decidí llamarla por teléfono, y ¡ oh casualidad ! todas las monedas que llevaba, las había entregado al pago de las entradas, ya que no tenían para devolverme el cambio de la moneda en papel. Me puse muy nervioso, y al fin conseguí lo suficiente para llamar desde un teléfono público.
— Jim ¡ Ya viene, ya viene !
Nervioso dije a las niñas que teníamos que regresar y entre sus protestas, tomándolas de la mano regresamos a casa.
Sentada en una escalera estaba mi esposa , bendita sea, con todos los apuros, pues el bebe, tenía prisa por llegar a este mundo. Inmediatamente la llevé al hospital. Era el día 1 de Mayo de 1982. ( Texto extraído de una entrevista al profesor Jim Dornan hace algún tiempo )
Me ha parecido bonito hacer referencia a esta anécdota y al mismo tiempo homenaje al recientemente desaparecido profesor: Jim Dornan.
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